A lo largo de los años, nuestra visión ha ido evolucionando hacia la consideración de empresa comprometida con la sociedad, trabajando por una educación más inclusiva y transformando la sensibilidad creciente de la sociedad por los problemas sociales en retos y oportunidades.
En línea con este compromiso, desde Femxa impulsamos diariamente acciones de formación, orientación y acompañamiento que proporcionen a todas las personas las herramientas necesarias para mejorar su empleabilidad.
El impacto social de estas acciones es más significativo si cabe cuando colaboramos con organismos públicos, cuyas ayudas destinadas a financiar planes y programas de formación son una vía de apoyo importante para la democratización del acceso a formación y logro de oportunidades educativas de calidad, con especial consideración para aquellas personas que están en situación de vulnerabilidad.
Este año, la convocatoria estatal nos permitirá ayudar a formarse a un 20% más de personas con respecto a 2022, llegando a cubrir hasta 110.000 plazas en cursos gratuitos acreditados por el SEPE.
La atención a colectivos prioritarios: un reto social y educativo
La sociedad actual se enfrenta a grandes desafíos globales, pero ninguno más apremiante que erradicar las desigualdades. El esfuerzo que están realizando las Naciones Unidas con la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) es evidente y, la educación, en este contexto global, se convierte en uno de los instrumentos indispensables que permitirá poner solución a estos nuevos retos.
En este sentido, desde Femxa contribuimos activamente al “ODS 4: Educación de Calidad” de la Agenda 2030 a través de nuestra oferta formativa, promoviendo oportunidades de aprendizaje permanente para la ciudadanía y destinando hasta el 50% de las plazas en cursos gratuitos a colectivos minoritarios, prioritarios o en situación de especial vulnerabilidad:
- Personas desempleadas de larga duración
- Personas menores de 30 años con bajo nivel de cualificación.
- Mayores de 45 años.
- Personas con discapacidad.
- Personas migrantes.
- Mujeres víctimas de violencia de género.
A mayor educación, mayor salario
El reciente informe de Esenciales elaborado por la Fundación BBVA e IVIE coincide en que los niveles salariales guardan una estrecha relación con los niveles educativos: «El aumento de salarios de los trabajadores, también denominado rentabilidad privada de la educación, procede de la productividad. Este se adquiere a través del sistema educativo, el aprendizaje en el puesto de trabajo o ‘learning by doing’ y la formación a lo largo de la vida o ‘lifelong learning’ ».
«Una población más educada tendrá acceso a mejores oportunidades laborales y salarios y, por lo tanto, a más ingresos disponibles, lo que beneficia a los mercados y al bienestar de la sociedad.»
Este estudio expone sólidas conclusiones respecto a las diferencias salariales existentes que se presentan durante la carrera profesional de una persona. Esto es, por ejemplo, a la edad de cumplir los 55 años, en la que un trabajador medio alcanza su mayor nivel de ingresos, una persona con estudios superiores recibe un salario que multiplica por 2,3 el de una con solo estudios secundarios obligatorios (ESO).
Este informe viene a demostrar que realizar estudios y formación continuada facilita la obtención de un salario superior, convirtiendo la educación en uno de los factores que reduce la vulnerabilidad en el mercado de trabajo.
2023: Año Europeo de las Competencias
En línea con lo expuesto, Europa se compromete a dar un impulso al aprendizaje permanente a través del denominado Año Europeo de las Competencias (European Year of Skills), una iniciativa que tiene como objetivo promover y mejorar las competencias y habilidades de la ciudadanía en toda Europa. Esta iniciativa busca que a través de la capacitación de las personas y las empresas se promueva la adaptación social y global a las transiciones ecológica y digital, apoyando así la innovación y la competitividad del mercado laboral.
«Buscamos con nuestras iniciativas impactar positivamente en el ODS 4, que garantiza una educación inclusiva, equitativa y de calidad.»
Desde Femxa estamos estrechamente vinculados a esta iniciativa de la Comisión Europea impulsando la mejora de la competitividad y el desarrollo del talento a través de nuestros planes de formación y metodología educativa, buscando la consecución de objetivos aplicables al conjunto de la sociedad, tales como:
- Contribuir a que en 2030 el 60% de los adultos participen en actividades de formación anuales.
- Alcanzar la meta definida en la Brújula Digital 2030, que pretende que al menos el 80% de los adultos cuente con capacidades digitales básicas.
- Ofrecer alternativas de formación a jóvenes sin empleo y sin estudios.
- Alinear las aspiraciones y las competencias de las personas con la demanda y oportunidades del mercado laboral.